LA NATURALEZA DE LOS ÁNGELES
Las llamadas religiones del “Libro”, en referencia al Judaísmo,Cristianismo e Islam creen en la existencia de espíritus superiores incorpóreos y puros, dotados de una inteligencia y de una sabiduría sobrehumanas. Dice el cristianismo que si se hubiese limitado Dios a formar el alma del hombre y no hubiese criado algo superior a ella,no encontraríamos en el universo imagen creada que reprodujera perfectamente la naturaleza y la vida divina; porque sepultada el alma del hombre en la materia y en contacto íntimo con el mundo de los cuerpos, no puede desprenderse sino lenta y penosamente de su existencia sensible y de sus imágenes inconstantes y variables para lanzarse a la altura de la idea eterna y universal.
Añade San Agustín que << Dos cosas habéis hecho de la nada, Dios omnipotente y de toda bondad, una más próxima a vos, otra más cerca de la nada; una de la cual vos sólo sois superior, otra que no tiene nada debajo de sí>> (Confesiones XII,7).
Y Santo Tomás dice que los ángeles son miembros activos de este gran todo concebido por Dios, en el que cada individuo tiene su cargo particular que cumplir, y su idea que realizar; transmiten los pensamientos de Dios, y son los mensajeros de su voluntad para con los hombres (Suma Teológica I CXIII, art.2).
En el judaísmo Dios creó las criaturas compuestas de materia y forma,como el ser humano; las compuestas de materia y forma, pero que no cambian, como los planetas y por último aquellas que poseen forma pero no materia, como los ángeles, cuya existencia es inmaterial aunque su forma está claramente separada la una de la otra.
¿Cómo se diferencian de una forma sobre otra si no poseen dimensión material?
Por su nivel jerárquico. Se trata de un nivel diferente espiritual. Su orden es el siguiente de mayor a menor:«Jayot HaKódesh»(Animales Santos),Ofanim»(Círculos),«Erelim»(Luces Divinas),«Jamshalim»(Destellos),Serafim(Serafines),«Malajim»(Ángeles),«Elohim»(Poderosos),«Beney Elohim»(Hijos de Poderosos), «Kerubim» (Querubines) e «Ishim»(Personas).
Todas estas formas espirituales viven y reconocen al Creador y lo comprenden con suma comprensión según su nivel. Así pues un Ishim,o último nivel de espíritu puro, el más cercano al ser humano,comprende al Creador de una forma superior a lo que nosotros podamos llegar a entender.
Sin embargo, el Judaísmo todavía ha profundizado más en estas criaturas. Los ángeles sólo tienen una voluntad, la que les ha dado Dios. Esto significa que no tienen libre albedrío como nosotros. No tienen inclinación al mal, es decir, al yetzer hará. Las personas pueden pecar, pero los ángeles no. El corazón de un ángel es espiritualmente diferente al de una persona humana y la prueba de ello está en el análisis que han hecho los rabinos de Génesis 18:5.
Génesis 18:5 «Traeré también un bocado de pan, para que recobre fuerzas su corazón,y luego seguirán su camino. ¡Para eso han pasado ustedes cerca de este su siervo!»
Y ellos dijeron:
«Haz todo tal y como has dicho.»
Ahora veamos Deuteronomio 6:5 «YAmarás a Jehová tu Dios de Corazón,y de Toda tu alma, y con TODAS tus Fuerzas»
En Génesis 18:5, Avrám está hablando a tres ángeles a quien de forma hospitalaria les ofrece pan para que“recobre fuerzas su corazón”. Aquí aunque sean tres ángeles Rabí Jama añade que debe entenderse corazón en singular y no “sus corazones”. Trae Rashi las palabras de Rabí Jama en Bereshit Rabá, quien expone que el hombre tiene dos corazones: uno humano y otro del alma, y concluye Rashi que Abraham se refería al corazón del alma, que solo hace el bien. El hombre tiene efectivamente dos corazones, uno que se inclina hacía el bien y otro que se inclina hacía el mal. Y eso se puede ver en el análisis hebreo de la palabra “corazón” que aparece por ejemplo en Deuteronomio 6:5 para referirse al del género humano.Aquí la palabra corazón viene compuesta por dos letras “bet”para indicar esa doble inclinación, mientras que en Génesis 18:5 la palabra “corazón” para referirse al de un ángel sólo lleva una sóla letra “bet”; ya que sólo tiene una voluntad, la del bien.(ver el dibujo/ esquema)
Más que dos corazones, lo que tenemos son “ dos fuerzas que moran en el corazón». Cada una de tus dos tendencias se llama «corazón»;una es el corazón puro mientras que la otra es la mala tendencia. Cuando en la anterior frase del Deuteronomio decimos que “Amarás a Jehová tu Dios de Todo tu corazón y de Toda tu alma” , hemos de comprender «con todos tus corazones», con tu buena y también tu mala tendencia. Como dice el Zohar (Kabbalah):
«con todos tus corazones» significa con tus dos tendencias: una de lado derecho y una del lado izquierdo, que equivalen a la buena y la mala tendencia.
Al servir al Altísimo con tus dos tendencias, causas una unificación de las sefirot jesed(bondad, que es la esencia misma del amor) y guevurá(reserva) con su fuente de origen celestial. De esta manera haces que la “reserva” se oculte para siempre bajo el amor, y el lado derecho de Dios siempre prevalezca.
De esta manera aprendemos que nuestra naturaleza espiritual es dual en nuestro corazón y que la del ángel no lo es. El problema surge cuando pasamos a analizar la otra cara de la moneda, la de un ángel malo o ángel caído. Ya que si partimos de la idea de que un ángel no tiene inclinación al mal, no es posible su rebelión.Temática teológica que no deja de ser compleja y de la que hablaremos más en adelante.
ESTUDIOS BIBLICOS 3.0 